Los ensordecedores gritos de la gente, los beats,
las guitarras, ver sonreír a Mark Foster maravillado por la emoción de un
público lleno de energía, personas sobresaltadas por tan formidable talento,
por esas tres jóvenes estrellas que con orgullo están al principio de su
carrera. Mientras los miraba pensaba en la suerte que tengo de conocer a esta
banda en sus años jóvenes, me atrevo a decir que su música ha revolucionado el
sonido de nuestros tiempos, tal vez suene exagerado pero me sentí como pienso se
sentía un fan de Oasis o The Beatles al verlos tocar en vivo en sus épocas
doradas. Son diferentes, frescos, aman lo que hacen y eso se nota cuando salen
a cantar bailando al ritmo del melodioso bullicio de los fans.
Tan cerca que podía ver cada
expresión y movimiento de Cubbie Fink, sacudía los corazones de los que
estábamos a centímetros de él, las luces azules cubriendo su rostro, tenía una
expresión indescriptible de dicha al hacer bailar sus dedos de una forma
natural y hermosa en el pesado bajo
color blanco que sostenía como a un niño con ambas manos.
Todo fue una ola enorme de sensaciones
dentro mi estómago, un nudo de gritos en mi garganta, escuchaba esa hermosa música y me sentía una
con el universo, las ondas del sonido, los bailes extravagantes de Mark, su
risa eufórica al escucharnos cantar todas sus canciones al unísono.
Es increíble la forma en que Foster transmite tantas emociones
encontradas, pueden hacer sonar estupendamente feliz una canción que habla
sobre algo triste, es una manera ingeniosa de mezclar sutilmente lo oscuro con
lo alegre y finalmente convertirlo en una pieza radiante de algo melancólico.
Su música habla de ellos, de
nosotros, de ciertas condiciones humanas que sólo se pueden explicar cantando.
Ganas de gritar, de reír, de
llorar de felicidad al darme cuenta que las esperanzas de la buena música no
están perdidas, que todavía hay personas hermosas que escriben letras con una historia
llena de significado, personas que saben cómo comunicar lo que sienten de una
forma admirable en un do re mi fa sol, talentos grandiosos. Esta seguramente es
una de las bandas que marcará la historia del mundo independiente y que dejará por siempre un recuerdo
hermoso en mi cabeza.
Gracias Foster The People, se han
ganado un gran lugar en mi corazón.