Sonrisitas mañaneras con mal
aliento alimentaban el corazón de Pluto, despertaba al lado de los pechos más
hermosos de la ciudad; todo era completo, hasta el café de las mañanas sabía
mejor, desde que ella pasaba las noches en su departamento todo estaba más
ordenado y había comida saludable en la nevera. La mañana trepaba las sábanas de la cama, y
ellos tendidos en su lecho hablaban de sus planes antes de preparar el
desayuno, imaginaban televisores más
grandes, autos nuevos, una mansión lujosa con un jardín enorme donde jugarían
sus cinco hijos junto a los perros y el sol brillante.
Todo iba bien hasta que ella
empezó a utilizar ese perfume de Calvin Klein; A Pluto no dejaba de picarle la
nariz, sentía que el fuerte olor dulce se metía en lo más profundo de su
sentido del olfato y le llegaba hasta el
cerebro contaminándole los pensamientos. Ideaba miles de formas de desaparecer
el perfume, esconderlo bajo la cama, botarlo a la basura, fingir que se le caía
al suelo por accidente, y la última opción, decirle a Andrea que su perfume
olía horrible. Ya toda la casa estaba llena de Calvin Klein, las sábanas de la
cama, el baño, el cuarto, hasta la comida tenía sabor a perfume, Andrea
cocinaba y todo quedaba con el ligero
toque de ese aroma , maldito el día en que se idearon esa fórmula
química que dio como resultado ese olor tan perturbarte.
Entonces, un día remoto cuando
los gallos que cantaban por la madrugada no hicieron ruido,
Andrea pegó un grito en el baño y sonaron los cristales endurecidos que se
quebrantaron frágiles contra el suelo.
Pluto saltó de la cama a ver qué había pasado, y se quedó parado inmóvil
frente a la escena, la muerte del perfume había sido ocasionada por su propia
cuidandera, y el ya no tendría que matarse la cabeza pensando en el homicidio
accidental de la fragancia. Esa misma noche, Pluto se llevó a Andrea a cenar
para celebrar, ella no sabía la causa repentina de alegría en su novio, pero no
le interesó preguntar.
Cuando llegaron a la casa a altas
horas de la noche, después de tomar mucho vino y reír como chiflados, el olor del
perfume no se había ido.
–Huele delicioso– Dijo Andrea en
voz alta
–Huele hediondo– replicó Pluto un
poco ebrio de tanto vino blanco.
Andrea lo miró agrandando los
ojos:
–Pero si huele al perfume que se regó esta mañana.
–Por eso– Pronunció Pluto con un
aire relajado y ausente.
–Sabía que lo odiabas–
–¿Lo sabías? –
–Sí– Respondió Andrea divertida
–¿Entonces por qué lo usabas? –
–Porque me gusta–
–Que va, lo hacías para joderme–
–A veces–
Pluto la soltó de las caderas y se fue furioso a su alcoba, se acostó y se tapó la cara con las sábanas y el cubre
lecho floreado. Más tarde unas caricias generosas lo despertaron, eran las
manos frías y escurridizas de Andrea que formaban figuras imposibles en la
piel de su espalda; él intento permanecer insensible a sus encantos , pero cedió
a la tentación peligrosa de los pechos suaves y el cabello largo y castaño.
Al día siguiente el olor del perfume ya se
había ido de la casa, pero todavía quedaba el aroma en el baño. Pluto hizo de
todo, lo lavó con jabón, con cloro, e incluso utilizó los remedios de las
abuelas para quitar el olor a zorrillo, pero nada funcionó, el baño quedó
oliendo por siempre a “Eternity Moment” de Calvin Klein, igual que la mancha del
tapete de la sala quedó oliendo por siempre a Dubonnet después del año nuevo.
soy tu primer cucharada del año :)
ResponderEliminarMe preguntaba que habia pasado con ellos.En realidad mi caro me gusta bastante el contexto y la trama que le das a una situacion muy basica :)
Vaya historia tan más divertida y buena. Me ha encantado la forma en que escribes. Te sigo, besos :)
ResponderEliminarDe encerio, deberias escribir un libro, amo tus textos♥
ResponderEliminargracias por pasar siempre por mi blog, au revoir
¿Es a ti a quién no le gusta ese perfume? al menos eso pareciera, me como el cerebro ahora preguntándome a qué olerá ese perfume. Haré una incesante búsqueda por todas las farmacias hasta que lo encuentre y lo huela y se disipen todas mis dudas.
ResponderEliminarMe gustó lo que escribiste, buen relato.
Saludos :)
Tu texto huele a alma ...mucha alma...narras de una manera ágil y envolvente.Gracias por tus palabras.T sigo.
ResponderEliminarMe gusto tu blog!! :D Te sigo te espero por el mio!!! ^^
ResponderEliminarJajaja buenísima! Escribes muy lindo, me lo he imaginado todo! Espero seguir leyéndote por eso te sigo, un besoo
ResponderEliminar