sábado, 19 de enero de 2013

Mi amiga Sofy.


El arte de irse para adelante y de para atrás cuando sabes que le gustas a alguien. Sofy es torpe para responder a una señal de acercamiento,  yo diría más bien que lo convierte  todo en un alejamiento, por eso está tan sola, sola solita sola. Pienso que su pelo es demasiado peinado y que alguien que critica los corbatines no es conveniente para ella, pero Sofy insiste en que es guapo y yo insisto que no es suficiente, le digo que es tonta mientras enciendo un cigarrillo. El otro día me contó que fue con él a un bar cerca a su casa, pidieron dos póker, pusieron música que yo no escucho. Las luces azules de neon hacían ver muy brillante la espuma blanca de la cerveza, Sofy se fija en esos detalles aunque a veces suene estúpida mencionándolos a la gente, ese día le dijo a David que con esas luces la cerveza parecía una bebida radioactiva; él se quedó en silencio mirando a unos viejos que reían en la puerta, como queriendo irse. Sofy se puso muy triste.

Quiero acordarme de la primera vez que pensé que el mundo es una mierda, pero no lo recuerdo, el recuerdo más cercano que tengo es los ojos de mi papá posados en mí mientras me acariciaba la cabeza y me decía: Voy a volver, voy a volver, lo prometo. Sofy sabe que todavía recuerdo a mi papá, ella me habla de los chicos con los que sale y aunque a mí no me interese me siento mejor porque puedo pensar en otras cosas. Una vez le dije que no habláramos de chicos, le dije que habláramos de átomos, del bing bang, del origen del hombre, de la misantropía, de política; pero siempre que hablamos de eso llegamos a la conclusión de que todo está demasiado dañado para ser reparado ahora, hay esperanzas pero muy pocas porque los hilos con los que nos ha manejado la sociedad se han hecho fuertes, uno intenta escapar pero siempre se vuelve, una y otra vez. La salida es ayudar a los que más lo necesitan, leer un libro que te lleve a algún lado, un papelito, un humo feliz que te transporte al borde de la vialactea mientras ríes y ríes con tus amigos. Por eso a veces prefiero que no hablemos de eso, me deprime.

Sofy no cierres lo ojos, no te sientas sola porque yo estoy contigo, nunca dejes de ser tú porque yo me doy cuenta cuando aparentas, cuando aparentas te extraño mucho pero luego vuelves a hablarme y me siento completa porque sé que te quiero y que vas a estar conmigo al menos en este momento. Yo algún día conseguiré un chico pero déjame decirte que por ahora no me interesa, por ahora me basta con la grata sensación que tengo cuando el olor a chocolate caliente me levanta en las mañanas, eso que siento cuando veo a alguien tocar cualquier instrumento, quiero aferrarme a esos pensamientos, no quisiera que algún mentiroso me robara mi sonrisa y mi tiempo, por eso hay que mirar bien, elegir bien, equivocarse muchas veces. 


9 comentarios:

  1. Ayudar es la mejor salida para evitar que el monstruo te devore.
    Bien visto.

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  2. Mirar bien, elegir bien, equivocarse... Demasiado trabajo, mejor dedicarse al bing bang o a la misantropía.
    Bueno, bueno. Un abrazo.

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  3. Me ha fascinado. Perdón por la expresión pero, escribes de puta madre!
    El texto me ha recordado a mi misma, quizás hace más tiempo del que yo quisiera. Y es que cuando encuentras a ese verdadero amigo, que sabes que va a estar siempre, que adoras con todo tu alma... el amor, el amor parece no ser tan importante. Ahórrate problemas, llantos, celos, mal humores.
    Acabo de empezar un blog, no sé si sea de tu agrado, pero espero lo visites.
    Un abrazo.
    http://my-pinkdreams.blogspot.com.ar/

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  4. Ahhhh bonita historia la de tu amiga Sofy, me ha encantado :))
    Ya me iré pasando cuando actualices ^^

    ¡Besitos!

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  5. La última frase es mortal.
    Es mejor tener a una única amiga que sepas que te quiere y que se preocupa por tí que tener a todos los hombres del mundo. Esa tal Sofy parece muy especial, no la dejes marchar nunca.

    Sigue escribiendo, deja que tu alma se libere y no dejes que los malos sentimientos se apoderen de tí.
    besos (con sonrisas)

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  6. Ay, yo también tengo una amiga llamada Sofy. Y también había pensado escribirle una entrada. Muy bonito lo que has escrit n.ñ

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  7. Tienes un don, me atrapaste de principio a fin, como siempre me pasa cuando leo algunos de tus escritos, no hace falta decir que me fascinas jaja

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  8. A veces esa amiga Sofy es el alma de cada uno de nosotros que intenta por todos los medios no fragmentarse.
    Hermoso texto. Me gusta el blog. Me quedo.
    Un beso.

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  9. Los amigos son muy importantes, los verdaderos amigos, los que se quedan, los que te miran y te ven, son muy valiosos. Yo mo hacía caso cuando decían que de esos sólo en la infancia y juventud. A los 40 quedan escasas oportunidades.

    Un beso preciosa

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